Señora cama ¿en qué habéis vos hallado
que tenéis que estar siempre rechinando
cuando en vuestro regazo está gozando
su hermosa dama el fiel enamorado?
¿Tenéis acaso de su gusto enfado,
que estáis lo que ellos hacen murmurando?
¿O vais a sus acentos remedando
como a la voz el eco en hondo prado?
¿Gruñís porque os deshacen, picotera?
Pues no os componen para estar compuesta,
sino para mejor descomponeros.
Guardaos y no os ganéis, por ser molesta,
que aprieten los cordeles de manera
que reventéis y no podáis moveros.
Ñac ñac ñac ñac ... los jodidos muelles
ResponderEliminar